Los alarmantes datos sobre el calentamiento global no dejan margen para dilatar más las acciones necesarias que permitan atenuar y revertir los nocivos efectos de la contaminación en el clima
El calentamiento global sigue desbocado. Lejos de contener la subida de la temperatura de la Tierra a 1,5 °C, como recomendaba el Acuerdo de París, vamos camino de los 2 °C y, según los datos que recoge la sexta revisión del panel de expertos internacionales sobre el cambio climático del IPCC, las proyecciones a 2030 indican que alcanzaremos los 3,2 °C. Por ello, los expertos que participan en el foro Ecosistema Ahora de EL PAÍS, que pretende situar la crisis climática en primer plano y abordarla desde todos sus ángulos, van desgranando una realidad bastante negra pero sazonada con apuntes de esperanza: hay margen para mitigar los efectos de la crisis climática si se acometen ya, sin más dilación, la reformas necesarias para la transición hacia una sociedad y una economía sostenibles.
Las prácticas y las llamadas a la acción se van quedando cortas ante la imperiosa necesidad de afrontar de forma más decidida la emergencia climática
Las urbes necesitan repensarse, acortar distancias, favorecer la movilidad activa, ser más amables con sus habitantes y ganar en resiliencia frente al cambio climático
Ante la hipocresía del llamado ‘greenwashing’ surgen nuevas formas de producir y consumir que se retroalimentan en un círculo virtuoso que abraza la economía circular y la compra responsable
El paleontólogo y codirector del Proyecto Atapuerca, reflexiona sobre cómo enfrentar la crisis climática para legar un planeta en las mejores condiciones posibles a las próximas generaciones
El coordinador de la Asamblea Ciudadana para el Clima destaca el valor y la necesidad de una sociedad bien informada en la lucha contra el cambio climático
La pérdida de riqueza y abundancia de especies avanza imparable poniendo en riesgo la supervivencia de la humanidad